Alberto Trabucco vuelve a su Quinta con una muestra artística en Vicente López

Este sábado 24 de mayo, en el marco del aniversario 120 de Vicente López, la Quinta Trabucco abrió sus puertas para inaugurar su muestra “Alberto Trabucco vuelve a la Quinta”, en que rinde homenaje al célebre artista y su legado.

La muestra exhibe 18 obras cedidas por Alberto Trabucco a la Academia Nacional de Bellas Artes, muchas de las cuáles fueron creadas en los espacios de la histórica casona de Vicente López donde hoy se realiza la exposición.

Las pinturas de Trabucco evocan personajes de una época ya lejana: niños, mujeres y animales representados, a veces, con una mirada idílica, y otras como parte del paisaje que lo rodeó durante su paso por el barrio de Florida. La exposición rinde homenaje a su legado, como parte de la Generación de 1921, grupo que marcó un hito en la renovación del arte argentino junto a figuras como Emilio Pettoruti y Antonio Berni.

La apertura de la muestra se enmarca en la inauguración de los festejos por los 120 años de la ciudad de Vicente López: el evento contó con la presencia de la intendenta, Soledad Martínez, el presidente de la Academia Nacional de Bellas Artes, Sergio Baur, y la presidenta y ex presidente de la Asociación de Fundadores y Pioneros de Vicente López, Ana Esperon y Oscar Fasano, quienes destacaron la relevancia de Trabucco en la historia cultural tanto del municipio como del país.

Durante la ceremonia inaugural, Soledad Martínez destacó: “Aquí se respira cultura todos los días y mantenemos vivo ese legado, para que quienes viven en Vicente López y quienes visitan este lugar conozcan su historia. Trabajamos con muchísimo compromiso y amor por la cultura y por la historia de nuestras ciudades”.

Alberto José Trabucco nació en la Ciudad de Buenos Aires el 24 de marzo de 1899. Vivió su juventud en la casa familiar del barrio de San Nicolás. A fines de la década del 50, Alberto se instaló finalmente en la Quinta Trabucco, donde realizó gran parte de su obra. Tenía su taller en el ala de la casa que hoy mira a la Panamericana, y guardaba los cuadros en el sótano, junto a conservas y provisiones.

Alberto José Trabucco nació en la Ciudad de Buenos Aires el 24 de marzo de 1899 y, después de pasar su juventud en la casa familiar del barrio porteño de San Nicolás, se instaló en la Quinta Trabucco a fines de la década del ‘50, donde produjo gran parte de su obra. Su taller estaba ubicado en el ala de la casa que hoy mira a la Panamericana, y sus pinturas eran guardadas en el sótano, junto a conservas y provisiones.

El artista, de perfil reservado, eligió mantenerse al margen del circuito tradicional: nunca realizó exposiciones individuales, aunque participó asiduamente en salones nacionales y provinciales durante cinco décadas, obteniendo reconocimientos como el Premio Estímulo del Salón Nacional en 1930, 1931 y 1935; el Premio Cecilia Grierson en 1934; el Gran Premio de Honor del Salón Nacional en 1965; y el Gran Premio del Sesquicentenario de la Independencia en 1966. Entre 1955 y 1958, participó de exposiciones en Barcelona, Estados Unidos, San Pablo y Bruselas.

Luego de su fallecimiento en 1990, y por voluntad de su madre, la casa fue donada a la municipalidad de Vicente López. En la actualidad, la Quinta Trabucco funciona como un espacio cultural público, rodeado de un extenso parque de más de una hectárea de vegetación autóctona, donde se dictan talleres, se realizan muestras y se promueve el arte en todas sus formas.

La exposición estará abierta al público hasta el 30 de agosto, de martes a sábado de 10 a 18 horas. Además, se ofrecen visitas guiadas gratuitas a cargo de Dina Resca, los viernes a las 17 h y los sábados a las 12:30 y 16 h.

Por su parte Sergio Baur, Presidente de la Academia Nacional de Bellas Artes, se expresó sobre el significado que tiene la exposición para la institución: “Es muy importante la muestra de Alberto Trabucco para la Academia. Es un artista de esos silenciosos, ocultos, austeros, pero que trabajó con la convicción de su talento, su creencia, su amor por lo que hacía, y por eso no respondió a los cánones del arte. Su legado artístico es excepcional”.

También participaron de la inauguración Mariana Castagnino, Secretaria de Acción Cultural de la Academia y curadora de la muestra junto a Mariana Gallegos del Santo y Victoria Lopresto; Ana Esperon, Presidenta de la Asociación de Fundadores y Pioneros de Vicente López; y Javier Varani, pionero.