La inseguridad, una preocupación que marcó la cotidianeidad de los argentinos
Los robos en inmuebles durante el año fueron un boom, en comparación al 2023. El análisis y balance surge de percepción de la seguridad de personas entre 18 y +46 años, residentes en AMBA. Se percibe a la inseguridad como el principal problema del país y de la localidad donde las personas residen respecto a un año atrás. Se cree que es consecuencia de falta de decisiones políticas.
En un año marcado por la creciente preocupación por la inseguridad, el Observatorio de Seguridad de la empresa Verisure presenta un informe revelador, en base a una encuesta realizada por CIO Investigación. El mismo subraya que esta problemática dejó de ser un hecho aislado para convertirse en una problemática a atender y que los robos en inmuebles demuestran una tendencia al alza, en comparación al año anterior.
Según el informe, en 2024 se registró un 60% de incidentes en hogares, mientras que solo el 40% ocurrieron en comercios. Esta tendencia representa un notable cambio respecto a 2023, cuando los incidentes estaban repartidos equitativamente entre ambos tipos de propiedad. Este aumento en la inseguridad en los hogares lleva a las personas a repensar cómo reforzar la protección agregando capas de seguridad a los inmuebles con tecnología de avanzada.
La tipología de incidentes también revela patrones preocupantes: las intrusiones son el tipo más común, seguidas por las solicitudes de SOS y los atracos. En ese sentido, las regiones más afectadas incluyen a las provincias de Córdoba (5%), Buenos Aires (4%), Rosario (4%), Mendoza (4%) y Tucumán (3%). Los fines de semana, especialmente los sábados y domingos, se convirtieron en los días de mayor incidencia delictiva, tanto en hogares como en comercios (bares, talleres industriales, oficinas y tiendas de atención al público). Además, el rango horario crítico para los robos se sitúa entre las 2 y las 4 am.
Los estratos sociales no difieren de preocupaciones en términos de seguridad. Atraviesa tanto al segmento más alto, conocido como ABC1, como así también, a los grupos de ingresos más bajos. Son las mujeres quienes tienden a señalar la escasez de autoridades, el desempleo y la falta de iluminación junto con una urbanización pobre como factores que agravan la inseguridad. El 76% de los encuestados mayores de 46 años opinan que la inseguridad es el principal inconveniente que atraviesa el país. Resulta llamativo que la segunda población intranquila corresponde al rango que va desde los 18 y hasta los 35 años con un 70% de alerta frente a este tópico; mientras que, apenas por debajo, con un 68% comprende el rango etario de entre 36 a 45. Los residentes de la Zona Oeste del Gran Buenos Aires destacan la inseguridad en las calles como un problema crítico, reflejando una percepción que se vuelve más intensa con el tiempo.
Esta percepción de inseguridad no es infundada; más de 7 de cada 10 encuestados experimentaron un hecho delictivo en los últimos dos años, y al menos el 40% de estos delitos fueron violentos. Es notable que los segmentos de menores ingresos (D2/E) y los jóvenes son los que reportan más frecuentemente haber sufrido situaciones de inseguridad. En estos sectores, la violencia es un factor predominante, afectando de manera desproporcionada a los hombres. Esto resalta la urgencia de abordar no solo la percepción, sino también la realidad de la inseguridad, donde las estadísticas muestran un aumento preocupante de hechos violentos que impactan directamente en la calidad de vida de los ciudadanos.
En respuesta a esta alarmante situación, un 31% de quienes sufrieron un delito contaban con un sistema de seguridad en el momento del hecho, y un 28% admitió haber contratado uno después de la experiencia. Las medidas de seguridad más comunes son los cuidados comunitarios y el uso de alarmas, siendo esta última más frecuente en sectores de mayores ingresos y entre personas mayores de 46 años. Curiosamente, entre los hogares con niños menores de 17 años, la adopción de sistemas de seguridad se incrementa, lo que refleja una preocupación palpable por proteger a los más vulnerables. Este aumento en la implementación de medidas de seguridad es indicativo de la necesidad de que las comunidades se fortalezcan y apoyen mutuamente en la creación de entornos más seguros.
En cuanto a los incidentes y delitos, en Buenos Aires, un 60% corresponden a hogares y un 40% a negocios. CABA tiene una notable concentración en comercios, alcanzando el 76% en esta categoría y el 24% en hogares. En Córdoba, el 65% fue en viviendas y el 35% en negocios. En Santa Fe, un 52% en hogares y un 48% en comercios. En la Costa Atlántica, el 71% corresponde a hogares. Luego aparece Mar del Plata que tuvo un 60% en casas y un 40% en negocios. La Plata registró un 65% en hogares y un 35% en comercios. En Tucumán, el 67% se dio en negocios y el 33% en hogares, mientras que en Pinamar un 75% ocurrió en viviendas y un 25% en negocios. Estos datos subrayan la urgente necesidad de implementar medidas de seguridad efectivas en todas estas áreas y reflejan el compromiso de Verisure por ofrecer protección en entornos donde la inseguridad sigue siendo una preocupación predominante.
“Las estadísticas que dan cuenta del aumento de robos seguidos de violencia o a mano armada son datos que pueden medirse, contrastarse y que permiten comparar a la Argentina con otros países. Desde mediados de los 90 la inseguridad ha estado siempre entre los principales temas de la agenda pública y también ha sido una preocupación fuerte de los argentinos. En los últimos años, el narcotráfico se instaló y solo ha incrementado esto. Pero más allá de los números, está la ‘sensación de inseguridad’ que puede medirse y fluctuar mucho con las repercusiones del tema en los medios. Por más que nos digan que estamos mejor que Colombia la gente siente y percibe otras cosas y es en función de esos sentimientos o percepciones que toma decisiones”, sostiene Cecilia Mosto, politóloga con especialización en Metodología de la Investigación en Ciencias Sociales y responsable de CIO.
Un resumen más detallado de los resultados en Argentina:
- En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el viernes es el día que registra más delitos en comercios y hogares. El 74% de los incidentes se dieron en negocios.
- En la provincia de Buenos Aires (PBA), la mayor cantidad de incidentes se dieron los sábados, en el horario de 2 am. La banda horaria que menor cantidad de hechos registró fue a las 6 am.
- Entre los barrios más seguros de CABA se detectaron Saavedra y Parque Patricios. Mientras que Caballito y Palermo fueron los más inseguros. El horario con mayor cantidad de hechos fue a las 14 pm.
- Según el porcentaje de clientes con casos reales, la provincia de Córdoba se posicionó como más insegura que Buenos Aires y esta última por encima de CABA.
- Mendoza es la provincia que más apuesta por la última tecnología en alarmas, que es el ZeroVision. Más del 80% de los clientes tienen este dispositivo. Por el contrario, CABA es la región que menos apuesta por dicho instrumento.
- Otra región que tuvo una muy buena aceptación de ZeroVision es Santa Fe, con 78% sobre el total de clientes.
- Mar del Plata tuvo una mayor cantidad de casos reales que toda la Costa Atlántica, pero estuvo por debajo de La Plata que se posicionó como el lugar más inseguro después de Buenos Aires.